Del autor

En el año 2003 escribí una columna en el diario La Opinión de Cúcuta criticando severamente la poesía del abogado Pablo Chacón Medina. La respuesta del abogado a mi columna fue una demanda penal por injuria y calumnia en un proceso amañado en el que Pablo Chacón pide una indemnización de 500 millones de pesos y cárcel para el columnista. Además exige que me retracte de mis opiniones académicas sobre su producción literaria. Cosa que no voy hacer. El caso ya cumple cuatro años. Dentro de poco, la juez que lleva el proceso citará a las partes implicadas a una audiencia pública. Allí se hará una valoración del proceso y se dictará sentencia. Para que el lector se forme su propia opinión sobre el caso, este blog brindará toda la información.


De la extradición, otra vez


Renson Said

Lo dicen todos unánimes: los políticos, los funcionarios del gobierno, los analistas profesionales, los jerarcas de la iglesia, los generales del ejército, los jefes de policía, los columnistas de prensa y hasta gente que anda jodida por ahí como Pambelé: "Uribe es un duro", "no le tiembla la mano para extraditar a nadie". Y ya ha extraditado a más de 250 colombianos a cárceles estadounidenses por delitos relacionados con el tráfico de drogas. La última en irse fue ´alias´ Sonia, la guerrillera de las FARC, cuando el país celebraba con una avalancha de flores el día de la mujer.

La extradición es una figura perversa que busca darle contentillo a los Estados Unidos para recibir a cambio la ayuda militar y financiera prometida a través del Plan Colombia.Y el Departamento de Estado norteamericano necesita mostrar que su política (o guerra frontal) contra las drogas es eficaz.

Y además parte de una premisa falsa: que la justicia que se aplica en Estados Unidos es, ella sí, justa, cuando se trata de la más perversa y cínica de las justicias imaginables. ¿Qué no?: pregúntenle a los palestinos. O a los chechenos. O a los congoleños. O a todas las víctimas de las incontables dictaduras tribales africanas que financia Estados Unidos de acuerdo a la dirección en que soplan los vientos de sus intereses mezquinos.

De modo que la extradición de colombianos es una prueba más de la debilidad del gobierno de Álvaro Uribe. Si el presidente fuera un tipo serio se daría cuenta que las extradiciones no han reducido el consumo, ni la producción, ni el tráfico en 25 años de guerra contra las drogas.

Es una guerra, sí, pero decretada por ellos y padecida por nosotros. ¿Cuántos jueces norteamericanos, o periodistas, o candidatos presidenciales han muerto en esa guerra? Ninguno, porque somos nosotros los que ponemos los muertos. Ellos son intocables, insobornables. ¿Insobornables? ¿Cómo pasa la droga las fronteras, cómo se comercializa, cómo se vende, cómo le llega a millones de norteamericanos, incluidas a las hijas de Bush, sin que nadie se de cuenta?

Y ahora dice Uribe que manda a decir Washington que aquí en Colombia lo que hay es una narcoguerrilla. Como si todos los problemas que existen en Colombia fueran el resultado de una alianza con el narcotráfico. Muchos años antes de que surgiera el narcotráfico ya existía la guerrilla porque existía a su vez un Estado que perseguía (como hace ahora) a los campesinos.

El narcotráfico no ha inventado nada. Se ha dedicado a fortalecer (y a complicar) los problemas que ya existían. Leí el otro día que el negocio de la droga prohibida deja en los bancos norteamericanos 500 mil millones de dólares al año, que equivale al presupuesto militar de Estados Unidos para el 2005. De ahí sale la plata del Plan Colombia. De ahí que Estados Unidos esté muy interesado en sostener el negocio y en incrementar la guerra. Eso ya lo sabíamos y tiene coherencia dentro de su perversidad. Pero lo que no podemos permitir es que el presidente Álvaro Uribe extradite colombianos para ganar votos y hacerse reelegir. Eso produce asco.

via_libre19@hotmail.com

3 comentarios:

Anónimo dijo...

De acuerdo!!! Sino preguntenle a la CIA de donde saco parte de la plata para comprar las armas de los contras en Nicaragua: De la cocaina y el crack que vendieron en los barrios de los negros en gringolandia. Quieren verle la cara de pendejo a la gente con sus noticias y estadisticas maquilladas sobre la supuesta guerra de USA contra el narcotrafico cuando se sabe que del negocio comen todos esos peces.

Anónimo dijo...

o preguntemole a los chilenos, o a los panameños, o a los nicaraguences, sobre los presidentes puestos e impuestos por el concenso; con el aval de la onu. indudablemente de acuerdo renson, quien gana no es El "Pseudotonto" sino el concenso que gran negocio.

Anónimo dijo...

por fin alguien se atreve a decir las cosas de frente. Estoy de acuero y admiro la postura libertaria de renson